Difícil era la salida a Morón de la Frontera, como así lo vaticinaba Ricardo Úriz y la verdad es que así fue. El Baloncesto Talavera no pudo lograr allí su primera victoria de la temporada en un encuentro que tuvo dominado durante 25 minutos pero que finalmente se le fue ante el empuje de Club Baloncesto Miniscenter Morón que espoleado por su público le acabó dando la vuelta para acabar venciendo claramente (102-81).
Un intercambio de golpes sería la tónica de un primer acto en el que los de Talavera de la Reina tomaban pequeñas ventajas que eran contrarrestadas por los de Morón de la Frontera, quienes se beneficiaban de la intensidad visitante para desde el tiro libre acumular puntos para su casullero.
Minutos de buena dirección de Cooper, que nada más entrar a pista clavó un triple que haría a los visitante recuperar el mando anotador del encuentro, lo que unido al acierto anotador tanto de Ganal como de Castillo desde el perímetro y de Doblas en la pintura permitían a los cerámicos colocarse con un 18-24.
A partir de ahí se nublaron un tanto en ataque los hoy de color blanco, quedando a merced de un Riley que dominaba en el rebote defensivo y aparte ayudaba en la anotación para dejar la renta de ventaja de los visitantes en un punto, siendo finalmente de tres al término del primer cuarto gracias a una acción un tanto rocambolesca con pase imposible de Cooper, salvada in extremis en la esquina con pase de espaldas y canastón de Peris sobre la bocina para el 25-28.
Una tónica similar tendría el segundo de los periodos, arrancando éste con un Aarón Ganal con una racha inmaculada de tiro y con los de la Ciudad de la Cerámica viviendo quizá sus mejores minutos del encuentro con muy buenas defensas y muy certeros y valientes en ataque. Una muestra de ello era una acción de un valiente Álvaro Martínez que entraba con todo hasta el fondo de la cocina para el 34-42, máxima ventaja visitante hasta el momento.
Pero por desgracia todo lo que sube, baja y un acertado Parejo tomó protagonismo para su equipo anotando cinco puntos y rebajando la renta a los tres de distancia, lo que provocó el tiempo muerto de Ricardo Úriz para devolver la tranquilidad a sus chicos.
No perdieron la ventaja los visitantes en este tramo final, pero sí que es cierto que quedó recortada a un único punto de distancia y pudo ser peor porque la tuvo sobre la bocina Dedovic con acción de aclarado sobre el bosnio que no lograría plasmar dejando de esta manera el 46-47 con el que nos íbamos al descanso.
Iniciaba muy bien el periodo para los intereses visitantes, que con un valiente Álvaro Martínez y con los inspirados desde el triple Peris y Ganal conseguían poner al Baloncesto Talavera nuevamente con ocho puntos arriba (50-58). Por desgracia los blancos habían llegado a su cima en este encuentro porque, a partir de ahí y por desgracia todo fue para abajo.
El partido se alocaba, se convertía en un correcalles y ahí el conjunto de Morón de la Frontera le sacó enorme rédito. De hecho en apenas un minuto la renta bajo a los dos de distancia para los visitantes (58-60) y tras tiempo muerto solicitado por Ricardo Úriz terminaron los sevillanos por tomar el mando en el marcador con Palmeo de Vázquez y canasta de Martín que ponían la cita en un 62-60.
Los minutos finales de este periodo no trajeron nada esperanzador para los de Talavera de la Reina, quienes rompían su bache anotador desde el triple, porque anotar en juego interior parecía imposible ante el poderío defensivo local, pero que iban en clara dinámica negativa para colocarnos en un 73-65 al final del tercer periodo.
Quedaba un todo o nada de diez minutos, ocho puntos que levantar de desventaja, pero la gasolina de los talaveranos estaba en reserva, perdiendo además por el camino a Peris por faltas. Morón seguía y seguía sumando puntos y escapándose en el marcador y adquiriendo ya rentas que invitaban a pensar que la remontada era una quimera para los de Talavera de la Reina.
Los visitantes sólo parecían tener algo de solución a su sequía anotadora desde el triple pero a cada canasta cerámica llegaban dos o incluso tres consecutivas, algunas de ellas también desde el 6,75, de los locales. Así renta crecía de los 15 a los 17, de ahí a los 20… y finalmente se quedaba en 21 de diferencia para un resultado de 102-81.
